La enseñanza de la ciencia está enfocada a los procesos curriculares que se dan en el aula, pero dicha didáctica es reducida ya que no ahonda específicamente. Las cuatro ciencias puras como tal se muestran para los alumnos de manera muy genérica sin derivar en las aplicaciones que tienen hoy en día, es solo materia informativa que se acaba olvidando con el pasar del tiempo. Por lo cual es necesario buscar medios de divulgación complementarios que difundan la ciencia desde el punto de vista aplicativo del hoy y sus avances. Uno de ellos es la televisión que interactúa de manera social con la gente creando un dinamismo que retroalimenta de manera más efectiva en la memoria de las personas debido a los recursos de imagen y video que se utilizan.
La influencia de la televisión en la formación y
deformación del ser humano es algo eminente, es por eso que se crea la
necesidad de utilizarla como herramienta de divulgación para que contribuyamos
como divulgadores científicos en la formación integral del ser humano con
contenidos televisión responsables que generen inquietud y discusión forjando
así a personas inmiscuidas en la realdad social.
A pesar de la critica que se le ha venido dando
desde hace algunos años encerrada en un calificativo poco favorecedor como
“caja tonta” podemos decir que ese embobamiento que logra para ciertas
informaciones poco necesarias se puede utilizar para invadir con cultura y
ciencia la mente de la gente, rescatando así su contexto persuasivo e incisivo
en el tiempo de la gente. Desde este prisma facilitamos la absorción de
conocimientos y aprendizajes necesarios para la educación general de las
personas.
Infravalorar el valor contextual de la
televisión para proyectar la didáctica de las ciencias es un gran error, ya que
es mucho el espacio que la gente le brinda a este medio a tal punto que
representa una escuela informal para muchos, sin contar con su influencia en
los comportamientos y patrones de conducta que invita adoptar. Como diría Jaman
y Mc Clune en 2002 “la televisión academiza”
En conclusión tenemos un recurso innegable
adoptado a la vida de la gente y que nos puede resultar de gran ayuda para
transmitir, alimentar e inquietar en el terreno de la ciencia, es primordial
sumarse a la realidad actual y hacer de estas herramientas de comunicación,
armas de educación.
ESCRITO POR K.Q.G
DERECHOS RESERVADOS